| 18/03/2011 | El llamado Cloud Computing, o trabajo en la nube, responde a las necesidades de los que trabajamos con una gran cantidad de datos e información.
Una forma de trabajar que cada vez cobra mayor importancia por su capacidad para ayudarnos en el ahorro, mejorar la productividad, y facilitar la colaboración.
Y aunque por el momento no esté totalmente extendido, seguramente cada vez sean más las empresas que se unan a este tipo de estrategia, motivado también por la facilidad en la implantación y las ventajas antes comentadas.
Esta nueva tendencia inftomática permite que las aplicaciones, datos y recursos de TI se nos proporcionen como servicios desde la red.
Pudiendo de esta forma acceder a la información y a los servicios desde cualquier ubicación.
Algunos de los beneficios más claros del Cloud Computing tienen relación con el ahorro, ya que necesitamos menos espacio de almacenamiento, se produce la automatizacion de ciertas tareas, etc.
Y destaca por otro lado la seguridad, es un entorno en el que se puede confiar y en el que los datos están a buen recaudo.
Y la agilidad, ya que con los catálogos de imágenes, el portal web de autoservicio, los entornos de prueba y desarrollo configurables, se da un rápido aprovisionamiento de recursos que se traduce, entre otras cosas, en una umento de nuestra productividad.
La novedad es que estos beneficios, que parecen siempre destinados a grandes empresas, pueden también beneficiar al resto, independientemente de su tamaño.
En IBM, para los que estéis pensando en uniros a la estrategia Cloud, podéis realizar un pedido desde la misma Web, de esta manera contratamos los servicios Cloud de forma gratuita y pagamos por los recursos solo cuando sea necesario.
Ahorrándonos los procesos administrativos y evitando otro buen número de trabas que pueden estar relacionadas con la contratación.
Podéis informaros y acceder a un estimador de costes en su página web: http://www-05.ibm.com/services/es/igs/cloud-development/ |
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