Uno de los momentos más importantes para una compañía, sus accionistas e incluso para sus clientes es el de comprobar cómo ha ido un producto y si este ha provocado beneficios o pérdidas. Nintendo ya tiene en sus manos los resultados de las ventas que corresponden a 2013 y, tal y como podéis imaginar, no son ni por asomo buenos.
En 2013, Nintendo perdió más de 400 millones de dólares. Una cifra que procede en su mayor parte al enorme fracaso de Wii U, la consola que tiró por la borda la buena popularidad que consiguió su antecesora y que a día de hoy es considerada por muchos como 'un grano en el culo de Nintendo'.
Los datos de Nintendo apuntan a un total de 6.2 millones de Wii U vendidas desde su lanzamiento. Pero si miramos la gráfica de ventas por trimestre, vemos que hay dos momentos en los que Wii U ha tenido algo de demanda… Los dos primeros meses tras su lanzamiento con 3 millones de unidades vendidas y la campaña de navidad de 2013, en la que se vendieron 2 millones de unidades más. el resto de trimestres ha sido un horror para la consola y la compañía, con ventas muy muy por debajo de las expectativas.
Con Wii U, Nintendo mostraba su apuesta por la nueva generación de consolas. Pero al contrario que sus competidores (Sony y Microsoft), la evolución le ha hecho perder clientes. También, parte de la culpa de su caída la tiene la decisión de seguir en la línea del juego casual donde, a día de hoy, lideran sin duda los teléfonos móviles.
La pregunta es ¿veremos pronto una consola nueva que rectifique el error cometido con Wii U? Esa es la duda que nos queda.
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