El éxito tiene en ocasiones un precio demasiado alto. Esta semana descubríamos que PS4 había conseguido unas ventas de vértigo en Europa, tras su paso por EEUU. Pero como decíamos, tanto éxito puede ser contraproducente para un producto en su lanzamiento.
Las primeras horas de PS4 en los hogares europeos han sido un auténtico caos. Desde problemas para iniciar sesión en PSN hasta falta de soporte para canjear códigos promocionales o la configuración de una tarjeta bancaria para comprar contenidos…
En Sony eran conscientes de estos fallos y aseguraban que hacían lo que podían…. El problema, según los representantes, es que había tanta demanda por parte de los usuarios que la plataforma estaba colapsada. Para aliviar el caos y permitir al menos el juego online, Sony decidía suspender temporalmente algunos servicios con el objetivo de ir introduciéndolos más tarde, cuando hubiese más normalidad.
A día de hoy, parece que el acceso a PSN desde PS4 está funcionando bien. Eso sí… Falta aún que se restablezcan los servicios suspendidos y que se permita el canje de vales, descuentos o promociones con los que algunos usuarios esperan comprar su primer juego para PS4. Sin duda, un caos. Pero ¿Es aceptable que se den estas situaciones con un producto que cuesta 400 euros? ¿Qué opináis?
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