Quienes sigáis asiduamente la actualidad tecnológica, sobre todo hardware para móviles y Tablet, conoceréis los famosos test de rendimiento Benchmark. Son aplicaciones que someten a los dispositivos a diferentes pruebas de rendimiento y que, tras recopilar los resultados, los puntúan y los añaden a una lista donde se comparan con otros modelos y marcas.
Para algunos, los test Benchmark son definitivos a la hora de comprar un móvil. Para otros, un aspecto más… Pero el caso es que algunos fabricantes han aprovechado el tirón que tienen a nivel de ventas para hacer trampas y provocar que sus dispositivos sean puntuados por encima de lo que debieran.
Es el caso de Samsung y HTC. Cuando algunos de sus dispositivos detectan que una aplicación de este tipo los somete a alguna prueba, estos responden con un forzado de su procesador durante el tiempo de la prueba. Cuando termina, vuelven a su estado natural para no salir ardiendo…
Futuremark, propietaria del famoso test 3DMark, ha publicado un post en el que asegura haber baneado a estos tramposos de sus resultados. Entre ellos encontramos al HTC ONE, al HTC One Mini, al Samsung Galaxy Note 10.1 y al Galaxy Note 3.
De esta forma, 3Dmark busca la forma de ser lo más justa posible a la hora de puntuar a los terminales. El objetivo es analizar cada dispositivo bajo las mismas condiciones en las que trabaja en manos del usuario. ¿Qué os parece? |