Ya han pasado unos días desde la presentación de Xbox One, la euforia ha bajado y también se han borrado de nuestras retinas las virtudes de la nueva consola de Microsoft. Ahora, en frio, uno empieza a digerir lo visto y a hacerse preguntas.
Es aquí donde surgen polémicas que están cabreando y mucho a la comunidad de jugones. Polémicas como el cobro de un canon por los juegos de segunda mano. Sí, habéis oído bien… Si hasta ahora uno podía ahorra unos euros esperando unos meses para comprar un juego de segunda mano en vez de descargarlo oficialmente, la actitud de Microsoft de asignar la clave de cada juego a la cuenta de cada usuario sólo pone trabas al crecimiento de la comunidad de Xbox One.
Es decir. Si compro un juego y más tarde, cuando ya no lo quiera, lo quiero vender, tendré que desvincular el juego de mi cuenta Live y el nuevo dueño activarlo. En ese punto, Microsoft cobrará un canon por asociarlo, ya que sí o sí tendremos que instalarlo dentro de la consola.
Lo que ocurre aquí es que el usuario deja de ver rentable la compra de juegos de segunda mano para Xbox One, ya que si suma lo pagado al canon cobrado, será casi lo mismo que comprar el juego nuevo. Y chicos… Esa es la idea.
Eso sí. Si queremos jugar en casa de un colega o familiar, podremos hacerlo gratis siempre que carguemos nuestro perfil de Xbox Live al iniciar el juego. Al menos, eso lo han respetado. |