Antes de marcharnos al fin de semana os contaremos algo realmente gracioso y al mismo tiempo vergonzoso. Como sabréis, las marcas suelen contratar a personajes famosos e influyentes para que representen sus productos en campañas publicitarias. Es algo lícito y uno sabe que el famosillo de turno habla bien de dicho producto por dinero.
Pero claro… Cuando se dan a conocer ciertas estrategias que resultan poco éticas y en las que se oculta la esencia promocional, entonces uno se juega su credibilidad. Y eso es lo que le ha pasado a Samsung con una campaña para su Galaxy S4.
Al parecer, Samsung habría pagado al tenista David Ferrer para que hablase bien de nuevo buque insignia, el Galaxy S4. Nada nuevo hasta aquí… El problema o la anécdota llega cuando Ferrer publica un mensaje en su cuenta de Twitter, hablando de lo bien que le va su nuevo Galaxy S4, lo que le ayuda la aplicación de serie S Health… Y todo bien hasta que aparece en el subtítulo del tuit la frase: 'Via Twitter for iPhone'.
Ahí es cuando toda la estrategia de marketing se cae por tierra y se descubre, no sólo que Ferrer no escribía desde un Galaxy S4 como aseguraba sino que quedaba evidenciado que tras las palabras de Ferrer existía un acuerdo publicitario con Samsung.
¿Qué pasa con estas cosas? Pues que la credibilidad tanto de Samsung como de Ferrer queda marcada y ahora uno ya no sabe cuando aceptar una opinión y si detrás hay dinero que tergiversa la realidad.
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