RIM, la empresa que en su día reinaba en el sector empresarial con los teléfonos inteligentes Blackberry, que marcaban la línea de lo que hoy en día tenemos, podría desaparecer muy pronto del panorama si no busca una forma contundente y rápida de recuperar el enorme mercado perdido en los últimos meses.
Hablar de BlackBerry es hablar, casi por completo, del sector empresarial, aunque en los dos últimos años se ha diversificado su mercado a usuarios domésticos. Realmente, RIM ha vendido en este tiempo más BlackBerry que nunca, solo que en comparación con lo invertido y con el resto de plataformas como Android o iPhone, su mercado ha descendido en sólo un año del 38 al 4% en EEUU.
Son precisamente estas dos plataformas -IOS y Android- las que se han hecho con el mercado de RIM, ofreciendo terminales muy atractivos, con funciones similares o mejores que las de BlackBerry y con un hardware que permite, además de utilizar los terminales para tareas simples, jugar, ejecutar aplicaciones de gran variedad, ver videos en grandes pantallas, etc.
No obstante, pese a que la tendencia apunta a una muerte casi segura de BlackBerry, sólo un último esfuerzo por parte de RIM, utilizando su nuevo sistema BlackBerry 10 como baza, podría salvar a la compañía, quien no descarta buscar socios fabricantes o incluso licenciar su sistema u otras marcas.
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