Seguimos nuestra sección de hoy con otro de los grandes juegos que he descubierto en poco tiempo. Se llama The Could Hurt y es además de otras muchas cosas, un título que te sumerge hasta tal punto que el tiempo se para a tu alrededor.
Es evidente que la ambientación gráfica de The Could Hurt es genial. Gráficos muy bien cuidados, con estilo de dibujos animados y un entorno totalmente conseguido. La trama del juego consiste en conseguir completar cada laberinto de obstáculos en el menor tiempo posible. No lo tenemos fácil porque hay decenas de trampas y obstáculos que hacen que tengamos que elegir muy bien cuándo pasar y cuándo no.
Para ello sólo es necesario pulsar sobre cualquier punto de la pantalla y pararemos al personaje que, por defecto corre. Lógicamente, cada nivel es más complicado que el anterior y la cantidad de trampas a las que tendremos que hacer frente, sincronizando nuestros movimientos a la perfección, aumenta por momentos.
Cada vez que una trampa nos toca nuestro nivel de vida baja, lo que significa que podemos morir si este se agota. Para poder pasar por ciertos lugares, por los que es irremediable ser tocados, podemos comprar algunas protecciones con los puntos que ganamos en cada nivel.
Sin duda, The Could Hurt os va a encantar.
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