Cuando llega la hora de cambiar de móvil todo son dudas, inseguridades, saturación de consejos de amigos y familiares… Y la verdad es que no es para menos si tenemos en cuenta que, o bien vamos a gastar un buen dinero en él o estamos firmando un contrato de permanencia que nos atará durante 18 meses, sin posibilidad de conseguir otro móvil en caso de romperse o de no estar a la altura de lo que necesitamos.
Como en cualquier compra que hagamos, antes de lanzarse a por un modelo o producto concreto hay que tener dos cosas muy claras: ¿Qué necesitamos y cuánto estamos dispuestos a pagar por ello?
Por eso hoy os vamos a ayudar a despejar ciertas dudas y os traemos estos pequeños consejos para comprar un móvil Android.
Saber qué necesitas: Lo primero para comprar un móvil Android
Como sabréis hay centenares de móviles en el mercado. Cada uno con sus virtudes y sus defectos. Generalmente hay tres gamas de producto que catalogan los terminales en función de las tecnologías usadas.
Para poder elegir un móvil hay que tener claro si necesitamos que, por ejemplo, nos sirva de sustituto de una cámara de fotos, si queremos utilizarlo también como un reproductor de música, si vamos a jugar mucho con él, si vamos a escribir muchos correos o mensajes…
En función de las respuestas que obtengas podrás apuntar a una gama u otra. Generalmente, a más calidad por cada apartado, de mayor gama será el móvil que necesites, pero siempre hay puntos intermedios que pueden cubrir dichas necesidades y no hay por qué comprar un modelo que esté por encima de estas.
Es quizás uno de los apartados más destacables. Actualmente se ha sustituido la cámara tradicional por el móvil gracias a la calidad de los sensores que estos incluyen. No obstante, has de recordar que la cantidad de megapíxeles no equivale a una mayor calidad de imagen. Lo importante es dar con un sensor potente como los que incluye Sony Ericsson en sus gamas más altas, Nokia en su N8 o terminales muy potentes como el Galaxy S2 de Samsung o los nuevos HTC.
A día de hoy ya hay tres niveles: un solo núcleo, dos núcleos y los recientes 4 núcleos. Aquí tenemos que tener en cuenta qué esperamos obtener de nuestro móvil y si realmente necesitamos tanta potencia.
Está claro que elegir un procesador potente se traduce como posibilidades de ejecutar juegos de última generación y gran calidad o poder navegar con mayor fluidez. A mayores prestaciones más dinero gastaremos. Por tanto, este será uno de los apartados que tendrás que meditar mejor para no equivocarte con el móvil que compres.
Podríamos entrar en detalles técnicos y hablar de las tecnologías AMOLED, LCD, Súper AMOLED, etc. Pero realmente, cuando uno va a comprar un móvil, apenas es capaz de diferenciar una tecnología de otra si no es comparándolas in situ.
Por tanto, si quieres ser práctico en este apartado, te recomendamos mirar más el tamaño de la pantalla o incluso su resolución, antes que la tecnología empleada. No obstante, en el mercado encontrará pantallas que ofrecen mayor luminosidad que otras, colores más reales y vivos, menor consumo… Es un mundo complejo y os hablaremos de él más adelante.
Quizás este punto sea tan importante como el resto. Actualmente hay tres o cuatro versiones de Android implementadas en móviles que aún se venden. Todas funcionan bien pero es importante buscar un modelo que presente de serie una versión actualizada de serie. La última en salir es Android 4.0 ICS. Teniendo en cuenta este apartado conseguirás que el terminal que compres no esté obsoleto al poco tiempo de adquirirlo.
También es importante que consultes las páginas oficiales de aquellos móviles que te gusten y busques planes de actualización de Android, porque eso significa que la marca seguirá dando soporte a dicho móvil.
Otros apartados que pueden marcar la diferencia entre un móvil u otro son menos visibles pero igualmente importantes. Por ejemplo, yo que uso el teléfono como centro multimedia, cuando voy a comprar un móvil Android busco que tenga salida HDMI para ver videos o fotos en la televisión y conectividad DLNA, lo que me permite reproducir videos y otros archivos multimedia de mis ordenadores, sin utilizar cables.
Por último, cuando ya tienes hecho un balance de lo que necesitas y de los móviles que cubren dichas necesidades, pasará a tomar protagonismo el dinero. Aquí sólo puedo decir que si habéis llevado bien el proceso de ajuste de las necesidades con respecto a los modelos disponibles, lo que gastéis va a ser una buena inversión y, por tanto, estaréis contentos con casi cualquier móvil que os llevéis. |
