La informática y sus componentes como hemos visto en otras ocasiones, tiende a reducir su tamaño, pero además, con la llegada de las memorias flash, se ha conseguido eliminar uno de los últimos elementos mecánicos que aún se encontraban en la composición de los ordenadores personales.
En concreto, estamos hablando de los discos de estado sólido (disco SSD), un medio de almacenamiento basado en las memorias flash, el cual ha superado todas las barreras de capacidad existentes por parte de las tarjetas flash, y las memorias Flash USB.
Es el caso del Disco SSD OCZ Z-Drive, un disco de estado sólido que utiliza una combinación de 256 MB de memoria caché local y que ofrece una interfaz de conexión PCI Express 2.0, la cual alcanza velocidades de transmisión de datos muy superiores a las ofrecidas por la interfaz SATA.
El disco SSD OCZ Z-Drive ofrece con respecto al típico disco duro, ventajas de ahorro de energía, acceso ultra-rápido a los datos, reducción casi total de ruido, más durabilidad, etc.
El nuevo disco de estado sólido OCZ Z-Drive se venderá en breve en 3 versiones de distintas capacidades, entre las cuales podemos encontrar configuraciones de 250GB, 500GB y 1 Terabytes. |