Competir a día de hoy en juegos portátiles con los Smartphone es todo un reto. Nintendo, a tan sólo unos días de la puesta a la venta de su 3DS, tuvo que bajar el precio por las bajas cifras de venta y ahora le podría tocar el turno a Sony, quien está sufriendo el mismo horror en Japón con su PS Vita.
Durante la primera semana de venta, PS Vita vendió 324.000 unidades. Pero en a segunda semana, cuando los Early Adopters terminaron de hacerse con una de ellas, dichas ventas descendieron en más de un 60%.
Razones técnicas no hay para explicar este fenómeno porque todas las críticas hacia la consola han sido muy positivas. Sin embargo, podría haber un culpable: la migración de los estudios de desarrollo de juegos a los móviles, donde ya hay un mercado mucho mayor que en modelos tradicionales de consola.
Según la revista Forbes, Sony debería de reducir el precio de PS Vita para hacerla más competitiva y apetecible, descontando al menos 60 euros de su precio inicial.
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