Tal y como hoy vemos en nuestro programa de noticias, Nintendo ha anunciado la bajada del precio de su nueva consola portátil 3DS de 250 a 169 euros. Una consola que para algunos tenía todos los ingredientes necesarios para triunfar en un mercado que no ha abrazado la propuesta con la fuerza que se esperaba,
La compañía, aprovechando el tirón de las tres dimensiones como otros fabricantes, decidió evolucionar su consola portátil DS, que durante años ha sido uno de los productos de entretenimiento más vendidos del mundo. Sin embargo, a día de hoy nos encontramos que se venden más unidades (en concreto el doble) de la DS original que del modelo 3D.
¡Claramente, esto tiene que tener una explicación lógica! En primer lugar está el precio, que al ser un producto nuevo se eleva hasta los 250 dólares. Pero bueno, si algo cae bien entre el consumidor, se paga (fijaos en PS3 cuando costaba 400 euros y vendía como churros). Por otro lado, el utilizar la tecnología 3D y una pantalla que no requiere de usar gafas como elemento de captación, parece haber sido más un inconveniente que una ayuda para las ventas.
¡Seamos claros! Actualmente la tecnología 3D presenta varios problemas:
- Por un lado encontramos la falta de contenidos, lo que lleva a convertir cualquier intención de compra en un simple gesto de malgastar.
- Por otro lado encontramos la calidad de la tecnología 3D. A pesar de que se han dejado atrás las gafas para este modelo, no dejamos de hablar de una mini-pantalla que, aunque ofreciese un 3D espectacular, sigue siendo incómoda por su tamaño.
- El tercer punto de mi reflexión sobre las bajas ventas de Nintendo 3DS va relacionado directamente con los Smartphone. Hasta ahora, las consolas portátiles eran el único dispositivo que nos permitía disfrutar de juegos decentes fuera de casa. Sin embargo, con teléfonos móviles de doble núcleo, capaces de mejorar la calidad de los títulos de Nintendo 3DS y a precios que no llegan ni a 7 euros (en el peor de los casos), veo muy negro el futuro del sector para Nintendo, Sony con su PS Vita o cualquier otro fabricante que quiera conseguir algo de él.
¡Ahí están! Esas son las razones por las que creo que Nintendo 3DS está siendo un fracaso y por las que PS Vita, cuando aparezca el año que viene, también lo será. ¿Y vosotros? ¿Qué pensáis al respecto?
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