Este es el HTC Desire S, la evolución natural del HTC Desire original, lanzado sólo hace unos días en España. Al ser una actualización de gama y no un terminal diseñado desde cero, nos centraremos en las diferencias y novedades que trae consigo el Desire S con respecto a su hermano pequeño.
Las principales diferencias las encontramos en el diseño. Si bien mantiene un línea muy similar al Desire original, vemos como HTC ha eliminado el TrackBall para compactar el tamaño del terminal, como también ha cambiado los botones físicos por táctiles.
Otro de los cambios más reseñables es la inclusión de una cámara frontal, con calidad VGA, que permite hacer videollamadas con el software indicado. Son cambios interesantes, pero nada que sea innovador en el mercado actual.
Los materiales del HTC Desire S son buenos, pues su carcasa trasera es de aluminio. En este apartado, tengo que decir que considero un atraso esconder la ranura para tarjetas de memoria en el interior del aparato, más si tenemos que andar pasando datos a otros dispositivos.
HTC Desire S, Hardware
A nivel de hardware, el HTC Desire S puede considerarse un teléfono de gama media. Nos os engañéis. Funciona muy bien, pero para escalar niveles debería de llevar un doble núcleo. En este caso, el modelo S equipa el mismo procesador que el Desire original, aunque eleva su memoria RAM de 526 a 768 MB.
Excepto la batería, que también ha sido incrementada de 1400 a 1450 mAh, el resto de componentes siguen siendo los mismos, incluyendo la cámara de 5 megapíxeles con HD y la pantalla de 3.7 pulgadas, que mantiene tecnología SuperLCD y resolución de 480 x 800 píxeles.
HTC Desire S, Software
HTC se ha centrado en una gama media, donde ha visto que domina el mercado. Es cierto que ante los nuevos doble núcleo, el Desire S es inferior, pero eso no quita que el terminal funcione a la perfección. La velocidad de un Smartphone se puede ver perfectamente usando el navegador y, como vemos, el Desire S carga realmente bien, el scroll es fluido y el zoom por gestos es suave. Al ser un teléfono HTC, la personalización del terminal está más que asegurada, gracias a la interfaz HTC Sense, aunque nos hubiese gustado tener la nueva versión 3.0, da mucho juego.
HTC Desire S, conclusiones
En conclusión, el HTC Desire S es un teléfono que funciona bien, más económico que los doble núcleo y apto para cualquier aplicación que deseemos instalar. Sin embargo, seguimos sin entender que tan pocos cambios con respeto al modelo original hayan sido razón suficiente para lanzar este terminal, cuando nos hubiese gustado ver, al menos, una salida HDMI o una cámara más potente que en el HTC Desire. |