Ayer hablábamos del nuevo servicio de música en la nube de Amazon, al que ha llamado Cloud Drive (Pulsa para ver cómo funciona). En resumen, es simplemente un disco duro virtual alojado en los servidores de Amazon, donde podemos almacenar hasta 5 GB gratuitamente o contratar más capacidad a 1 dólar / MB.
Desde un punto de vista técnico, ‘La Nube’ actúa como un disco duro externo, sólo que en vez de utilizar un cable de 1 metro, utilizamos el cableado de Internet y podemos acceder a nuestros archivos desde cualquier dispositivo y lugar del mundo. Esto significa que, si tenemos música libre de DRM y comprada de forma legal, no tiene por qué incurrir en ningún acto ilícito el almacenar dichos archivos en la nube.
Sin embargo, en cada oportunidad de negocio que se abre, aparecen los típicos ‘listillos’ que quieren sacar partido de las ideas y trabajo de los demás. El caso es que Sony Music podría emprender acciones legales contra Amazon si no renegocian las licencias de reproducción con la discográfica.
Es decir, que Sony Music considera que el almacenamiento de música en la nube no es un derecho del consumidor, quien ha pagado por la compra de dicha música. Además, no olvidemos que hablamos en todo momento de música sin DRM (libre de copiar en otros dispositivos para consumo del comprador).
¿Creéis que debe ser considerado ilegal almacenar música en la nube para consumo propio? |