Durante estos últimos meses hemos oído hablar bastante de la Neutralidad en la Red. Un término que quizás pueda resultar desconocido para muchos y confuso para otros. Por eso, vamos a tratar de explicarlo con la mayor sencillez posible y centrándonos en los datos más relevantes.
Cuando uno habla de la Neutralidad en la Red, está definiendo una igualdad de condiciones e imparcialidad para todos y cada uno de los elementos que componen lo que hoy conocemos por Internet.
En el ciberespacio, existen diversos componentes que hacen de la Red un centro de información y entretenimiento para todos. Están los internautas, los webmaster (propietarios de páginas web), los buscadores y los ISP (empresas que ponen sus infraestructuras para que podamos navegar bajo un coste).
¿Qué pasaría sin Neutralidad en la Red?
Cuando, por ejemplo, uno abre el navegador, ha de escribir una dirección o URL para navegar a través de Internet. Lo normal es tener como página de inicio a un buscador (la mayoría Google), y a partir de ahí, enlazar con determinadas páginas o servicios. Tanto nuestra conexión como la de dichas plataformas trabajan sobre líneas de red que tenemos gracias a un contrato con algún ISP (Movistar, ONO, Vodafone, etc., que en definitiva es quien hace posible que podamos o no acceder a un determinado sitio.
Imaginad que queremos entrar a YouTube para ver un video y nuestro ISP decide ralentizar mucho la conexión a ese site o incluso bloquear el acceso, con el fin de que para ver videos, debas de utilizar un servicio propio del ISP o el de otra empresa con la que ha acordado una repartir ganancias.
Esa decisión de priorizar o bloquear el libre acceso a los sitios que queremos es, precisamente, lo contrario a ser neutro. Otro ejemplo sería que un ISP bloqueara nuestro acceso a Facebook para que la única red social que pudiéramos utilizar fuese la suya propia… (Eh aquí otro ejemplo de lo que no es ser neutro).
Algunos ISP y operadores ya priorizan el tráfico
Cuando hablamos de Neutralidad en la Red, lo que exigimos es que nuestros pagos mensuales por un conexión nos den el derecho a acceder a cualquier página web o servicio online libremente, sin sufrir bloqueos o carencias en la red por motivos comerciales, algo que por desgracia, ya se está viendo en algunos países y operadores.
Desgraciadamente, los gobiernos aún no han tomado la Neutralidad de la Red como un tema de prioridad y, por tanto, no se ha llegado a ningún marco regulatorio que garantice a usuarios y empresas TIC un acceso libre y sin manipular a todos los contenidos de Internet por igual, lo que está dando pie a muchos ISP a crear clausulas en sus contrataciones a usuarios, que los obligan a pagar más dinero para poder acceder a YouTube a una velocidad optima u otros servicios.
En Reino Unido, O2 ya limita la velocidad del P2P y de YouTube a los usuarios que no contraten un producto concreto, lo que desde mi punto de vista, no se debe de permitir.
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