¿Se puede ser más hipócrita? Esa es la pregunta que me he hecho al conocer la noticia que tratamos. La página de descargas ilegales más popular del mundo (Rapidshare) podría modificar su modelo de negocio- actualmente basado en proporcionar espacio para que cualquiera pueda subir y descargar archivos con derechos de autor – para crear, junto a productoras, discográficas y artistas, una tienda online de descargas legales.
Hasta aquí todo tiene algo de sentido, pues recordemos que Rapidshare está sufriendo pérdidas millonarias por las demandas de cientos de sociedades de autores, propietarios de contenidos, etc.
Lo que no tiene justificación es que durante años se ha estado lucrando de estas actividades ilegales (mediante ingresos publicitarios y cuentas Premium), y ahora defina a los usuarios que han llevado a esta empresa a lo más alto de la red, como ''delincuentes''.
Ahora, Rapidshare estaría en proceso de negociación con varias compañías para crear una tienda online de contenidos ''legales'' como películas, series, música, programas, libros, etc. Todo ello pagado por la compañía con el dinero generado a través de las descargas ilegales.
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